Los remedios caseros de las abuelas han vuelto a ganar popularidad. Entre ellos, uno llama especialmente la atención: poner hojas de laurel en los pies antes de dormir. Aunque pueda sonar extraño, muchas personas aseguran que este sencillo gesto ayuda a aliviar molestias y favorecer el bienestar general.
¿Por qué el laurel?
El laurel (Laurus nobilis) es una planta aromática muy usada en la cocina mediterránea, pero también tiene una larga historia en la medicina tradicional. A sus hojas se les atribuyen propiedades:
- Anti-inflamatorias
- Analgésicas (calmantes del dolor)
- Antimicrobianas
- Relajantes y ligeramente sedantes
Por eso no solo se usa en infusiones, sino también en aceites, ungüentos y ahora en este curioso truco de colocarlo directamente en los pies.
¿En qué consiste el truco?
La idea básica es muy sencilla:
- Tomar 3 o 4 hojas de laurel secas, enteras.
- Lavarse bien los pies y secarlos.
- Colocar las hojas:
- Dentro del calcetín, a la altura del talón o la planta del pie,
- O directamente sobre la piel y luego ponerse el calcetín.
- Dejar las hojas durante varias horas, normalmente toda la noche, mientras se duerme.
- A la mañana siguiente, retirar y desechar las hojas.
Algunas personas también recomiendan romper un poco las hojas antes de ponerlas, para que liberen mejor sus aceites esenciales con el calor del cuerpo.
Beneficios que se le atribuyen
Desde la tradición popular se mencionan varios posibles beneficios:
